Nombre
científico: Arbutus unedo
Nombre
común: Madroño
El
madroño es un pequeño árbol muy interesante para utilizar en los diseños
siempre que tengamos en cuenta sus condicionantes.
Como especie será una magnífica elección desde el punto de vista de la integración en el jardín de tipo mediterráneo y más aún teniendo en cuenta su hoja perenne, que aporta un atractivo color verde durante todo el año.
Como especie será una magnífica elección desde el punto de vista de la integración en el jardín de tipo mediterráneo y más aún teniendo en cuenta su hoja perenne, que aporta un atractivo color verde durante todo el año.
El
principal problema será su lento crecimiento, por lo que no debemos utilizarlo
pensando en él como protagonista o elemento estructurante de la composición. Si
lo vemos como una especie arbustiva más, que algún día alcanzará el porte de
pequeño arbolito, el concepto cambia y se abren así más posibilidades de
utilización. De esta manera, podemos pensar en el madroño como en el complemento arbustivo a otras especies arbóreas de
más rápido crecimiento.
En
cuanto a los vistosos frutos, es necesario saber que su ingesta produce dolor
de cabeza y que llegan a provocar embriaguez, por lo que no es recomendable
comerlos y es conveniente controlar que no lo hagan los niños en algún
descuido. Los racimos de color, entre el
amarillo y el rojo, se ven espectaculares cuando llega el otoño, pero debemos
tener en cuenta que pueden provocar suciedad si están en zonas pavimentadas o
cercanas a las construcciones.
Podemos
ubicarlo al sol o en semisombra y agradecerá algo de humedad pero con buen
drenaje.
¿Te apetece ver uno de mis jardines en YouTube?. Te cuento las 7 CLAVES que me llevaron a diseñar este JARDÍN MEDITERRÁNEO con PISCINA:
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